La criminalidad en Internet puede afectar a cualquiera y las consecuencias pueden ser graves, pero a la hora de interesarse por un seguro privado contra el ciberdelito, se recomienda averiguar antes si ya no se está protegido mediante otra póliza.

Casi nadie puede prescindir hoy en día de Internet, ya sea para comprar, estudiar, informarse o entretenerse.

El mundo en línea ofrece no solo posibilidades ilimitadas, sino que también alberga peligros. Los estafadores roban contraseñas, compran productos falseando identidades, disperan virus o dañan la reputación con publicaciones difamatorias.

De acuerdo a una encuesta de la asociación digital alemana Bitkom, muchas personas se sienten verdaderamente amenazadas por la ciberdelincuencia.

El 94 por ciento de los consultados afirma que la amenaza de los delincuentes en la red es cada vez mayor. Y el temor al uso indebido de los datos es especialmente elevado, ya que afecta al 79 por ciento de los encuestados.

Pero no solo crece la preocupación, sino también los casos concretos de ciberdelincuencia en Internet. El 61 por ciento de los usuarios afirma haber tenido alguna experiencia al respecto, seis puntos porcentuales más que en la encuesta de 2019 (55 por ciento).

Diferentes coberturas

Las consecuencias de un ataque exitoso pueden ser graves. Para protegerse de los diversos riesgos, las aseguradoras ofrecen pólizas de ciberseguridad, paquetes de protección especial o módulos adicionales.

Las compañías prometen responder ante daños que se generen a causa de la ciberdelicuencia, por ejemplo ataques de hackers o virus.

Las tarifas incluyen muchas veces también el rescate o la recuperación de los datos robados. Las prestaciones pueden abarcar además la búsqueda de datos robados en la denominada Darknet, redes ocultas a las que solo se pueden acceder con navegadores especiales.

La póliza puede ofrecer asimismo la posibilidad de un reembolso en caso de que se compre en una tienda en línea fraudulenta, se pague la factura pero nunca se reciba los productos.

"Las compañías de seguros compensan los daños, a menudo hasta con cantidades de cinco dígitos", dice Anja Käfer-Rohrbach, subdirectora general de la Asociación Alemana de Seguros (GDV) en Berlín.

La especialista precisó que un ciberseguro también puede ofrecer una cobertura si criminales asaltan la cuenta bancaria del asegurado luego de que éste haya revelado por error sus datos de acceso a través de un correo electrónico de phishing.

Ayuda en casos extremos

Algunas pólizas también cubren infracciones de derechos de autor. Si alguien sube involuntariamente una foto protegida a una plataforma de Internet o publica una foto conocida, puede recibir una carta de advertencia. "Sin embargo, las exigencias de los titulares de derechos son a veces exageradas", dice Käfer-Rohrbach.

Por otra parte, también se necesita ayuda profesional y rápida en casos de mobbing, de acoso, trato hostil o vejatorio en el ámbito laboral. "Una aseguradora puede proporcionarla, por ejemplo, ofreciendo ayuda psicológica por teléfono y encargando a especialistas la retirada de contenidos de la red", señala Käfer-Rohrbach.

"Qué se proporciona y cuándo dependerá del alcance del seguro, es decir de las prestaciones acordadas", detalla por su parte Sandra Klug, de la central de defensa del consumidor de Hamburgo.

En general, afirma, la cobertura de daños es limitada. Klug indica que, por ejemplo, se aseguran daños de hasta 10.000 ó 15.000 euros (entre 11.300 y 17.000 dólares) por rubro, como estafas en compras en línea o los ataques en la banca por Internet.

Los costos de recuperación de datos suelen estar cubiertos por un importe de entre 1.000 y 2.000 euros, dependiendo del alcance del seguro.

"Se puede acceder a un ciberseguro a partir de unos 50 euros al año", explica Klug. Sin embargo, los costos podrían ser significativamente mayores según el alcance de la cobertura del seguro.

Otros seguros también pueden ayudar

No todos los que navegan en Internet necesitan obligatoriamente contar con un ciberseguro. "Una póliza de este tipo tiene sentido para una empresa que quiere proteger sus operaciones comerciales", sostiene Klug.

La experta recomienda a los usuarios comprobar primero si los seguros con los que ya cuentan les brindan la suficiente protección.

"Los seguros de responsabilidad civil, por ejemplo, cubren los reclamos por daños tras el envío inadvertido de virus", explica Anja Käfer-Rohrbach.

Klug también se refiere a los seguros del hogar y comenta que algunas compañías, aunque no todas, tienen una cláusula que ofrece ayuda para rescatar datos o en caso de pérdidas económicas tras el robo de datos bancarios.

La defensora de los consumidores aconseja a los ciudadanos que actualicen sus pólizas de seguro existentes, si es necesario, en función de su propio comportamiento, o que contraten un seguro de responsabilidad civil o de hogar.

El seguro de defensa jurídica también puede ayudar en los litigios. Y quienes padecen problemas psicológicos desencadenados por el ciberacoso a menudo pueden pagar los costos del tratamiento a través de su seguro médico.

FUENTE: www.infobae.com